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Las brujas de Salem. A partir de la letra W
29 de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma:

         Entusiasmados con la Letra Escarlata que nos comenta nuestro colega chiapaneco, avecindado en el Distrito Federal, hoy CDMEX, Roberto López Moreno demos lectura a su prosa.

Con la letra W, en español, se inicia la palabra Wichita, el nombre de un grupo étnico que habitaba las extensiones norte continentales y que nada sabían del puritanismo que un día iba a cruzar el océano para avasallarlos.
También desde el español se puede componer la expresión washingtoniano, para designar a los originarios de la ciudad que representa la unión de los estados que se formaron después de cruzado el Atlántico.

Con la letra W, en inglés, se puede decir wacky, para denominar lo absurdo.
También se puede decir weeping, para referirnos al llanto.
         Ahora, la W se va a convertir en nuestro eje.

Cuando llegaron los puritanos a las costas atlánticas americanas el fanatismo instauró lo absurdo y el llanto, wacky and weeping.
Una de las primeras ciudades fundadas fue la de Salem y aquí no entrarán a participar en el texto asuntos fílmicos, ni escenográficos, sino hechos reales, que fueron dentro de los marcos históricos.
Una de las grandes fechorías de la sociedad puritana fue su cacería de brujas llevada a cabo después de los juicios de Massachusetts en 1692.

Los enconos entre los fanáticos hizo que en Salem se condenara bajo cargos de brujería, como resultado de la gran histeria que en ese sentido habían desatado las autoridades en la región, a hombres y sobre todo a mujeres a quienes finalmente no se les pudo probar nada.
Durante aquellos acontecimientos fueron ejecutados siete hombres, trece mujeres y 400 personas más fueron arrestadas y enjuiciadas.
Todo esto provocó un torrente de acusaciones falsas entre los habitantes.
Bajo signos de extremismos religiosos creció un caudal de procesos amañados entre los que incluso fue acusado, para evitar la ira de Dios, hasta el presidente mismo de la Universidad de Harvard.

Todos se espiaban y se delataban, todos se acusaban, todos se indiciaban… histeria absoluta… demencia colectiva.
En los interiores las libertades individuales eran manoseadas morbosamente por el exterior investido.
A tal grado había llegado el absurdo que el propio gobernador William Phillips tuvo que perdonar 18 meses después a los sospechosos que todavía no habían sido ejecutados.

         Cuatro años después de estas deformaciones aquí relatadas, los jurados que habían dictado sentencia desde su celo en preservar lo moral, lo casto, lo puro, se vieron obligados a firmar una confesión de error para reiniciar de esa manera una nueva página de su historia.

         Uno de los jurados más feroces, quien incluso se negó drásticamente a firmar esa confesión de error fue William Hawthorne, bisabuelo del escritor Nathaniel Hawthorne.

Aquí, en este punto, nos vuelve a aparecer la W que habíamos anunciado como eje de este texto.
Wichita, washingtoniano, wacky, weeping, etnia, gentilicio, absurdo, llanto y aparece una W más, la que Hawthorne agrega a su apellido para diferenciarse por ese medio lo más posible de la infamia de su antepasado.

Y no sólo eso, sino que escribe una de las novelas clásicas de la literatura estadunidense:

La letra escarlata, en la que hace una severa denuncia de los hechos ocurridos y de los graves daños que pueden provocar en las sociedades y en los individuos el fanatismo y la intolerancia religiosa.       De la novela escrita por Nathaniel se desprende que los puritanos de 1620, que desembarcaron en Cabe Code, los de 1650, que ya poblaron por miles la zona, es el año en el que se ubica su novela, se parecen mucho a los puritanos de hoy y de siempre.
         En todos los casos su cerrazón puede llevar a la muerte.
craveloygalindo@gmail.com

 


De otro amigo poeta y escritor
28 de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Por cierto, nuestra gratitud al Instituto Mexicano del Seguro Social, por enviarnos a casa material informativo sobre el virus y auxiliarnos con cubrebocas, jabón, gel con base de alcohol y paracetamol, en caso de fiebre o dolor.

Y otra cosa, mariposa.

“Mi querido Carlos, en reciprocidad a tus atenciones te envío este texto mío, espero que te interese. Un abrazo hermano.

Sobre La letra escarlata. Roberto López Moreno nos aconseja que leamos el libro, como buen ejercicio para aprehender la buena literatura, para filosofar sobre lo bueno y lo malo que podemos ser dentro de la misma unidad.

Sobre los ángeles y demonios que nos revolotean en torno.

Sobre el pecado y su pretendido acto conjurador (perversión multiplicada), sobre la luz y la sombra.

Cerremos el libro, pero al ponerlo sobre el buró no nos asomemos al espejo, porque podemos identificar en el centro vitrio una letra escarlata que nos cubra el pecho.

Y sabremos que no es cierto, que tal imagen no es real, que es la malvada imaginación con su portentosa fuerza creadora la que desde las confluencias del cómplice reflejante nos estará gritando que sí es cierto.

Leamos del poeta y escritor chiapaneco Roberto López Moreno sus puntos de vista, lúcidos y reveladores.

X (Equis), quien en cualquier descuido podría cubrir patronímicamente el diccionario íntegro (son los tiempos que son, que es el tiempo), falleció de agudo e intransigente vulvibácter que le marcó sin inflexiones la pena moral y su muy visible deterioro físico…

Y prefirió la muerte, una muerte que bien pudo haber sido conjurada con un oportuno tratamiento antibiótico.

El miedo a la intransigencia de las mayorías mata.

No es de hoy ni del 1600, no es del 1850, cuando se escribió la novela La letra escarlata, no es por las vaporizaciones de estas puntuales tropicalerías ni por las incomodidades climáticas de lo muy al norte pervivente.

Es, en veracidad suprema, un fantasma que por las encrucijadas de todas las geografías los seres en comunidad se reparten para la flagelación.

Los prejuicios de las religiones anti sexuales son el abono más eficaz para esto.

La voz ventajosa de las mayorías, alevosa y perversa que, sabiéndose el cuerpo de los más, se ovilla hipócritamente en los crespones de lo que decidieron como el bien y desde ahí.

Su pluralidad descarga el odio contenido contra la singularidad, la persigue, la cerca, la atormenta, voltea hacia ella la culpa para disimular las propias, método efectivo comprobado una y muchas veces a lo largo de la historia de la humanidad.

La mayoría tiene la razón, la minoría con su presencia solitaria plantea el debate irresoluble y muestra las entrañas de la libertad del uno aplastada por el reglamento de los muchos.

El marco duro e inflexible desde la geometría que en su exactitud no late, sólo demuestra, es impuesto contra el pulso, dueño de los caminos, mismos que no le permiten transitar porque la libertad envenenaría a los coludidos con la ley, la que se crea para armonizar y se convierte en imposición y asesinato.

¿Cuántas veces hemos sido llevados al centro de la plaza por fuerza de la multitud justiciera?

¿Cuántas veces la mayoría nos ha elevado hasta la dignidad pavorosa del patíbulo y nos ha hecho pagar nuestra soledad frente a la rabia conglomerada?

¿Cuántas veces nos hemos tenido que rehacer de horca o guillotina por haber pretendido sernos leales?

Las mayorías mandan y sus fanatismos, en lo moral, en lo religioso, en lo político, firman la sentencia. Luego la ejecutan.

Y hay que volver a nacer para repetir el episodio. Para ello hemos contado con todo el tiempo del mundo.

¿Qué sufre más, la mente o la carne?

La mente es atormentada con la conciencia del delito cometido.

La hacen creer en él, padece, se angustia; a veces acepta ante el natural de todos, y a veces sufre más todavía al rebelarse frente a la vesania enceguecida que clama por el crimen como venganza porque criminal califica el agravio que dice que se le ha cometido.

La mente se inclina hacia su reducto intimísimo de libertad y sufre profundamente ante la sordera y la ceguera de la ira masiva.

Para los inclinados hacia la carne creemos que ésta es la que más sufre.

Porque además de conllevar los efectos de las mismas prohibiciones, su promoción angustiante y represora, soporta directamente, como adversa suma, el dolor de la agresión física, la conflagración en la piel, la hendidura en el cuello, la horadación del proyectil, el filo de la rata en la mazmorra, el escupitajo que quema. Pero la carne sufre desde antes, desde que se convierte en el objeto de la prohibición.

Algo tan vital, tan principal, tan sustancia en la vida humana; se le carga de amarras, de vergüenzas, de cadenas (mentales y reales) porque se le identifica con el diablo, esto en el horno propio de las religiones contemporáneas.

Se le identifica con el diablo quizá porque se piense torcidamente que la libertad de la carne lleva finalmente a la libertad del hombre.

¡Sexo!, grita el diablo.

Y la mayoría somos pobres diablos hipócritas, que queremos… pero nos persignamos para tener las manos ocupadas.

Entonces las cavidades húmedas se clausuran a sí mismas, los volúmenes expandidos se disimulan y a veces hasta se les flagela por el intento de romper los moldes de lo que ya impuso lo sagrado.

Los deseos se domeñan a bozal y rienda firme y crece la palabra pecado como valladar primero, cuyo abatimiento, si lo hay en colmo de desacato, se pagará primero y después con el martirio de la carne y después y primero también con el martirio del alma.

No hay salvación posible, las buenas conciencias, las buenas costumbres, los buenos modales impondrán finalmente la salvación de la carne y la del alma.

¿Así fueron los primeros pasos del puritanismo de aquellos casi legendarios colonizadores de la Nueva Inglaterra?

¿Los primeros pasos del “hombre civilizado” en el norte de nuestro continente?

Hombres de fanatismo bien calzado -de lo que existen fehacientes testimonios- nos hacen pensar en aquellas imágenes que la intolerancia debe haber diseñado para los que no comulgaran con la cerrazón de la alabardada mayoría que imponía sus creencias, y sus leyes morales y sociales a partir de esas creencias.

craveloygalindo@gmail.com

 


No podemos callarlo
27 de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma.

No podemos contenernos y lo compartimos lo que el 13 de diciembre de 2013 publicó. Hace siete años.

Fecha simbólica por ser nuestro cumpleaños.

Pero antes hace una acotación sobre la carta de Adolfo López Mateos sobre la energía, como prefacio.

“El presidente ALM... ¡ah, no: AMLO!, --bueno, el que haya sido, quién les manda tener iniciales parecidas-- tuvo razón en sus mañaneras sobre la necesidad de que los psicólogos ayuden a aguantar el encierro, y la doctora Chávez atinó sobre los malos mexicanos -léase EPN y compinches- que entregarían el petróleo mexicano a los voraces particulares extranjeros.

Caray, creo que me hice bolas, así que mejor te mando un artículo que hice y pasó de noche, cuando la fechoría peñista:

¿Cómo callar? Fue su título, entonces.

Es de nuestro colega don José Antonio Aspiros Villagómez, severo, pero justo. Han pasado siete años, pero hoy es más que oportuno:

“13 de diciembre de 2013.

“Cómo callar. Cómo decirles a nuestros hijos, y ellos a sus hijos, lo que le hicieron a México unos bastardos. Cómo suponer que ‘Las siete hermanas’ petroleras -hoy más numerosas y fuertes- son unas hermanas de la caridad que vendrán a salvarnos.

Vienen a lo suyo.

Cómo esperar que un Estado más raquítico que Rocinante -“adelgazado” alegremente desde el salinato- pueda contener con el solo sustento legal ese poder económico mundial, si hasta se dobla ante los poderes fácticos locales, en especial las televisoras.

Cómo no pensar que se corre un riesgo no visto en este país desde que se perdió la mitad del territorio.

Ahora viene la entrega de la riqueza del subsuelo: petróleo y gas, porque de la minería ni qué decir: 500 años de saqueo, inclusive a cielo abierto con su afectación ecológica y para mayor beneficio de otros, no de la clase obrera.

Cómo no creer que se llegó a esta medida por la inacción, la incapacidad y las corruptelas de la misma clase política responsable del patrimonio petrolero, que por lustros se cruzó de brazos y hasta reculó con la nueva refinería de Tula mientras Estados Unidos trabajaba afanosamente en las exploraciones profundas en el Golfo de México.

Cómo no acusar a esos apátridas de ignorar deliberadamente las experiencias previas a la expropiación de 1938, cuando se rescató el crudo por desacato de los patrones extranjeros a la autoridad judicial en un diferendo con los trabajadores mexicanos.

Cómo olvidar que el capital nunca ha tenido patria y por eso Lázaro Cárdenas acusó a las empresas privadas de haber gozado de privilegios y sólo haber aportado una magra contribución al país.

Y porque -preguntó también- “¿en cuántos de los pueblos cercanos a las explotaciones petroleras hay un hospital, una escuela o un centro social, o una obra de aprovisionamiento o saneamiento de agua, o un campo deportivo, o una planta de luz?”.

Cómo no suponer que se repetirá esa historia, si ya actualmente hay tantos que laboran sin prestaciones ni derechos, ni defensa legal posible.

“Yo no me puedo enfermar”, dice en la propaganda gubernamental un panadero sin los beneficios médicos y sociales que se suponen por ley.

Y le seguirán los nuevos obreros del petróleo si no les permiten sindicalizarse.

Cómo no estar de acuerdo con José Saramago, evocado por Layda; con el sociólogo Roger Bartra quien, aún galardonado por el gobierno, para enojo presidencial dijo que “habrá que esperar otro periodo de reformas a las reformas”, y con la experta en arte Raquel Tibol, que también criticó la reforma energética.

“¿Ustedes creen que las modificaciones del Senado son para bien?”, preguntó durante un homenaje en Bellas Artes por sus 90 años de edad.

Cómo haber ignorado a esa mayoría de mexicanos que, según estudios del Centro de Investigación y Docencia Económicas, coinciden en que la inversión extranjera en este país es buena, mientras no sea en el rubro petrolero, lo cual llevó a esa institución a considerar que, “sin duda, el baluarte del nacionalismo económico sigue siendo el sector petrolero”.

Cómo aceptar los epítetos insultantes de ‘nostálgicos’, ‘trasnochados’ y otros así contra quienes vislumbran que, con todo y lo que diga la reforma energética, el poder político terminará por ser rebasado por la presión del poderío económico.

Cómo se canalizará la impotencia de quienes, de una u otra forma, se opusieron a estos cambios, y cómo juzgar a quienes, opuestos también, ni pio dijeron.

Cómo darán la cara si los resultados son adversos, quienes ahora con cinismo y sonrisas burlonas se abrazaron y festinaron su fechoría.

Cómo, finalmente, permitimos que toda la atención y la protesta se concentraran en gas y petróleo ¿Y la electricidad? ¿Cómo quedó?

El tecleador ya había bajado la cortina por el resto de 2013 pero, ¿cómo callar?

Por supuesto, no podemos quedarnos callados, agregamos nosotros:

craveloygalindo@gmail.com

 


Con hambre y sed de justicia
26 de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma:

El siempre recordado y malogrado candidato a la Presidencia de la República, Luis Donaldo Colosio Murrieta, en aquel discurso que pronunció en la Plaza de la República el 6 de marzo de 1994 y que presuntamente le costó la vida, pegó en la llaga de los gobernantes, funcionarios y políticos espurios, cuando dijo que:

“Vemos a un México con hambre y sed de Justicia”.

Así seguimos, por desgracia, Luis Donaldo.

Obviamente que se refería a la justicia social, pero dentro de ella también a la procuración y administración de justicia. Las fiscalías y tribunales tienen una deuda permanente y muy pesada con el pueblo todo.

Existe un principio básico en la ley y por tanto es un mandato: la justicia debe ser pronta y expedita, verdad de Perogrullo.

Justicia que no es pronta y expedita no es justicia.

Así nos lo plantea el licenciado Alejandro Gertz Manero Procurador General de la República, hoy Fiscal General (FGR).

Y que mejor que compartirlo con el pueblo, al quien está dedicado. Claro, tiene razón al llamarlo indefensión ciudadana.

Díganme si no tenemos razón, al hacerlo.

El Ministerio Público, que se autodenomina institución de buena fe, tiene en los delitos del fuero común una credibilidad mínima, ya que más de 90 por ciento de la población prefiere asumir sus daños antes que acudir a esa instancia.

Todo ello se prueba con las estadísticas del Inegi: de cerca de 33 millones de los delitos del fuero común en todo el país, sólo se denuncian 2 millones.

Quedan cerca de 95 por ciento de los casos en absoluta impunidad.

Y de los denunciados, el Ministerio Público sólo judicializa 98 mil, deja en el desamparo absoluto a 99 por ciento de las víctimas.

Es, de hecho, la indefensión ciudadana.

Todos los habitantes de este país podemos acudir ante un juez para defendernos en materia civil, mercantil, laboral y administrativa, entre otras.

En cambio, donde más sufrimos la injusticia, la impunidad y el delito, que es en asuntos penales, ahí el sistema jurídico y la

Constitución nos niegan ese derecho y se lo otorgan al Ministerio Público, quien es el titular del monopolio de la acción penal, lo cual significa que esa institución es la única que puede acusar ante un tribunal a los presuntos responsables, salvo mínimas e inoperantes excepciones.

A mayor abundamiento, a la víctima no se le concede siquiera la calidad de parte en la acción penal –también sólo en casos contadísimos y en temas menores.

Como si las personas que han sufrido un delito fueran incapaces o ineptas y, por ello, se les impone una especie de tutor forzoso que, sin ser juez y sin tener las responsabilidades como tal, va a actuar como juzgador y va a decidir si efectivamente se cometió el delito denunciado.

Y qué acciones se van a realizar para probarlo, así como cuánto tiempo se tardará en hacerlo si no hay un detenido –lo cual ocurre en la mayor parte de los casos.

Se deja de esa manera a la víctima a merced de un funcionario administrativo que, sin poseer la independencia, las características y la autoridad de un juez, actúa como si lo fuera, sin sujetarse a los plazos y actuaciones que son obligatorios para los juzgadores.

Estos datos oficiales, que son abrumadores, ratifican nuestra tesis en el sentido de que esa institución, el Ministerio Público, no representa con la mínima efectividad y honradez a las víctimas del país.

Ya que el sistema la ha utilizado repetidamente como instrumento de control político, venganza o extorsión, lo que es ya intolerable.

Hay que corregirlo de inmediato para que las personas que han sufrido algún delito puedan tener todo el derecho de acudir directa e inmediatamente ante un juez para denunciar e iniciar el procedimiento judicial en el que aportarán pruebas, actuarán como parte y obtendrán la sentencia que corresponda.

En este contexto, el Ministerio Público debe tener la oportunidad de reivindicarse, dignificarse y fortalecerse, participar responsablemente en tres ámbitos fundamentales:

Primero, como auxiliar del juez y del ofendido, para realizar dentro del procedimiento penal las tareas que el propio juez autorice y ordene, pues muchas sólo pueden ser ejecutadas por una autoridad administrativa, como lo es el propio Ministerio Público.

Segundo, como representante de la víctima, cuando ésta se lo solicite, antes de ir a juicio, para que le auxilie a obtener todas las pruebas necesarias que un particular no puede exigir directamente.

Y, en esas circunstancias, que lo apoye durante la investigación y luego durante el juicio como un verdadero aliado de la justicia, de la sociedad y de la víctima.

Tercero, debe ser necesaria la participación prioritaria, obligatoria e ineludible del Ministerio Público cuando se cometan delitos federales o locales, en contra de las instituciones, los gobiernos, el patrimonio y la seguridad del país o de las entidades federativas.

Ahí, el MP debe actuar en forma directa e inmediata en respuesta a cualquier denuncia justificada para defender a la nación misma, a las instituciones, a los bienes de cada estado, así como a sus servidores públicos.

Y, en esos casos, toda la responsabilidad de la acción penal debe recaer en el Ministerio Público para que actúe con la prontitud y la eficacia que las leyes le impongan para que las investigaciones no se eternicen, se corrompan o se manipulen.

Para ello, es indispensable señalar con toda precisión en la ley la independencia política y administrativa de esa institución, los tiempos máximos y las diligencias que se deben realizar obligatoriamente, así como los requisitos procedimentales que se tienen que cumplir para que, de esa manera, la nación y el patrimonio de cada entidad federativa se hallen protegidos y defendidos.

Reconocer también la capacidad de cualquier persona para denunciar ante un juez los delitos que afecten a la nación o a las entidades federativas y que, entonces, opere la función del Ministerio Público en los términos establecidos.

Todo lo anterior muestra, por una parte, la impunidad procesal que prevalece en 99 por ciento de los delitos que se investigan en el fuero común y, por la otra, su posible solución inmediata.

Quién debe hacerlo, seguramente puede y quiere, es el Congreso de la Unión.

Pero…

craveloygalindo@gmail.com

 


La traición a la Patria
25 de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma:


 En México la Constitución es muy clara: los recursos energéticos y los yacimientos petroleros son a perpetuidad propiedad única y exclusiva del pueblo mexicano.


 El resto de las especulaciones al respecto son traición a la patria.


 Industrializar el país no implica una subasta pública de nuestros recursos naturales, ni la entrega indiscriminada del patrimonio de la patria.


Revelamos lo que el presidente de México, Adolfo López Mateo, dio a conocer al pueblo en septiembre 27, de 1960.


“Les devuelvo la energía eléctrica, que es de la exclusiva propiedad de la Nación, pero no se confíen porque en años futuros algunos malos mexicanos identificados con las peores causas del país intentarán por medios sutiles entregar de nuevo el petróleo y nuestros recursos a los inversionistas extranjeros.


Ni un paso atrás, fue la consigna de Don Lázaro Cárdenas del Río, al nacionalizar nuestro petróleo.


Hoy le tocó por fortuna a la energía eléctrica.


 Pueblo de México, los dispenso de toda obediencia a sus futuros gobernantes que pretendan entregar nuestros recursos energéticos a intereses ajenos a la Nación que conformamos.


Una cosa obvia es que México requiere de varios años de evolución tecnológica y una eficiencia administrativa para lograr nuestra independencia energética; sería necio afirmar que México no requiere de la capacitación tecnológica en materia eléctrica y
petrolera.


Pero para ello ningún extranjero necesita convertirse en accionista de las empresas públicas para apoyarnos.


Solo un traidor entrega su país a los extranjeros; los mexicanos podemos hacer todo mejor que cualquier otro país.


Cuando un gobernante extranjero me pregunta si hay posibilidad de entrar al negocio de los energéticos o a la electricidad, le respondo que apenas estamos independizándonos de las invasiones extrajeras que nos vaciaron el país.


 Pero que en tanto los mexicanos sí queremos invertir en el petróleo americano o en su producción de energía eléctrica, por si quieren un socio extranjero.


En México la Constitución es muy clara: los recursos energéticos y los yacimientos petroleros son a perpetuidad propiedad única y exclusiva del pueblo mexicano. El resto de las especulaciones al respecto son traición a la patria. Industrializar el país no implica una subasta pública de nuestros recursos naturales, ni la entrega indiscriminada del patrimonio de la patria”.


         Así de sencillo actúa hoy el señor de las mañaneras. Con energía, como acostumbra.

La sobreprotección no es buena consejera, no olviden las leyes naturales: el que se adapta crece. Y la ley del más fuerte.


Preocúpense por criar hijos fuertes, bien alimentados, contamos con un sistema inmunológico y un instinto que nos defiende de los peligros.


Una madre temerosa cría hijos débiles, inseguros, dependientes que los limitan de crecer en las adversidades.


Una madre segura de sí misma, está consciente que las carencias son una buena manera de educar, enseña a pensar a sus hijos, a tomar decisiones, respeta su personalidad, pone límites y lo educa para la autonomía, independencia, seguridad y confianza en el mismo.


Un hijo sobreprotegido será presa fácil de enfermedades y de toda clase de abusos.


Dejemos a una experta que habla de lo que sabe. Si la dotora Rosa Chávez Cárdenas, que así lo explica:


Epidemias y plagas como las de Egipto que cuenta la biblia han ocurrido a lo largo de la historia.


Con la diferencia que, en la Pandemia del Coronavirus, Covid19 la información fluye en momento real, la enfermedad es el prototipo de la globalización, ningún país  quedará blindado, el contagio se extendió rápidamente por todo el planeta, parece que regaron con drones.


Increíble que en pleno siglo XXI, con todos los adelantos científicos y tecnológicos no puedan parar el contagio.


Que vulnerable es el ser humano, ha podido conquistar la luna y viajar a otros planetas y un virus microscópico nos tiene aterrados.
Para evitar que la infección se propague surgió el nacionalismo y el cierre de fronteras, los países se blindaron negando la entrada a los extranjeros, pero el virus no necesita pasaporte, no hace distingos, ni respeta países.


 La crisis sanitaria ha puesto en evidencia la debilidad de los sistemas de salud, sobre todo el de nuestro país afectado por tantos recortes de la nueva administración y viejas prácticas de corrupción.


El confinamiento en el que estamos inmersos presenta graves consecuencias sanitarias, en la economía y la salud mental.


El encierro en pequeñas casitas con varios miembros de familia con carencia de recursos genera conflictos familiares.


El confinamiento y la abundancia de noticias alarmistas tienen a las personas en alerta.


El miedo es un mecanismo de defensa, real e imaginario que los mensajes y las autoridades se han encargado de incrementarlo.


Las autoridades no se asesoran con profesionales en psicología, actúan con el argumento de preservar la salud. No toman en cuenta a la hora de hacer las campañas que incrementan el miedo y los dejan en estado de indefensión.


Las clases en línea son apenas un experimento que dejó ver la inequidad del sistema educativo, muchas escuelas no están acostumbradas a trabajar con la tecnología.


La falta de recursos en las zonas marginadas los deja fuera de recibir clases ya que no cuentan con internet, celular, ni televisión.


Los niños de la clase media y alta están más acostumbrados al uso de dispositivos, sin embargo, no ha sido fácil adaptarse a la nueva modalidad y al encierro, además de las exigencias de los maestros, que les urge terminar el programa y también sufren mucha ansiedad.
Lo más importante para no afectar sus defensas es permanecer relajados. La sobreprotección no es buena consejera, no olviden las leyes naturales: el que se adapta crece, y la ley del más fuerte.

craveloygalindo@gmail.com

 
De nuestros ancestros
22de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Los primeros impresores fueron italianos

El oficio de impresor de textos tuvo en Nueva España el sello característico de los italianos, quienes trajeron a América el elemento cultural que reavivó o caracterizó la vida cultural y artística del virreinato.

Giovanni Paoli (Juan Pablos), procedente de Lombardía, fue el primer impresor en el continente y se instaló en la ciudad de México en 1539 con permiso de establecer tipografía.

En ese mismo año publicó ‘La breve y más compendiosa doctrina cristiana en lengua mexicana y castellana’, y en 1544 editó ‘La doctrina breve’ del obispo Juan de Zumárraga, y la ‘Doctrina cristiana para instrucción de indios por la manera de Historia’ de fray Pedro de Córdoba.

Otro impresor fue Antonio Ricciardi, quien abrió el cuarto taller tipográfico de Nueva España y se convirtió en predilecto de los jesuitas, quienes le mandaban imprimir todos los documentos requeridos para la catequesis.

En 1577 imprimió ‘Los emblemas de Alciato’ y ‘Los tristes’ de Ovidio.

En 1579 ‘De Constructione octo partium orationis’ de Manuel Álvarez, además de la ‘Introducción en la dialéctica de Aristóteles’ de Francisco de Toledo y el ‘Tratado de la esfera’ de Francisco Maurolico.

La inmigración italiana fue muy insignificante en la historia de México si se le compara con otros flujos migratorios, pero dejó huella pues contribuyó a la vida cultural, política y económica del país, expuso Octavio Espíndola Zago, historiador por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.

En una charla titulada “Proyectos de colonización: inmigración italiana siglos XVII-XX” que ofreció en el Centro de Estudios de Historia de México (CEHM), el especialista en historia de la cultura política moderna y contemporánea en Latinoamérica presentó un panorama sobre la inmigración italiana al país.

Dejemos a la historiadora Norma Vázquez Alanís, nos lo platique, con la alegría y buena prosa, como ya nos acostumbró.

Mencionó desde quienes llegaron con Hernán Cortés, hasta los que vinieron en la primera mitad del siglo XX, así como los proyectos

de colonización que hubo durante el interinato de Manuel González, cuando el Ministerio de Fomento era encabezado por Carlos Pacheco Villalobos en el periodo 1881-83.

La ‘Fernández Leal’, hoy pueblo de Chipilo, en Puebla, es la única que sobrevive de las seis colonias de agricultores extranjeros establecidas con el propósito de “importar campesinos europeos que blanquearan la población.

(el gran sueño al que después dio forma José Vasconcelos en su libro ‘La raza cósmica’)

Y le enseñaran al indio mexicano cómo trabajar la tierra”, porque en el siglo XIX se consideraba que el natural de México no sabía hacerlo.

La mayoría de los italianos que emigraron a México venían del septentrión transalpino, o sea la parte norte de Italia que de los siglos XVI al XVIII se conoció como la gran Lombardía.

Y fue hasta la segunda mitad del siglo XIX y ya bien entrado el XX, cuando el flujo migratorio sufrió una inversión debido al proceso de industrialización del norte de Italia, mientras el sur vivió el atraso del campo y se convirtió en expulsor de labriegos.

Pero se trató de un flujo a cuentagotas, muy escaso si se compara con los demás extranjeros que llegaron a México. Las cifras lo demuestran: llegaron dos mil 400 alemanes, tres mil ingleses, 13 mil 700 españoles, ocho mil franceses y sólo dos mil italianos.

Spíndola Zago aclaró que usaría en su charla el término “italianos” por economía de lenguaje, pero según la precisión conceptual éste sólo se puede emplear a partir de 1881cuando los Estados Pontificios se incorporaron formalmente a la Casa de Saboya, la cual llevó a cabo la unificación de la península itálica.

En ese entendido, dijo que los primeros italianos que desembarcaron en territorio mesoamericano lo hicieron con Hernán Cortés y su huella se puede rastrear en las ‘Cartas de Relación’ del conquistador, en la ‘Historia verdadera de la conquista de la Nueva España’ de Bernal Díaz del Castillo, en la ‘Historia de las Indias y conquista de México’ de Francisco López de Gómara y en el Archivo General de Simancas, en Valladolid, así como en el Archivo General de Indias en Sevilla, donde muchos de sus documentos ya pueden consultarse en formato digital.

Según esos documentos el primero de los italianos fue Vicencio Corzo, conquistador y encomendero de Tamantli en el arzobispado del Estado de México.

Aparecen también Bartolomé de Chavarín, un genovés al que se cita así en las ‘Cartas de Relación’: “fue jinete en la conquista de la Tenochtitlan, lleva tres caballos, una cota de malla, un per punto de malla, casco, gorguera, yelmo y armas, en retribución se le otorgó encomienda en Jiquilpan, Jalisco”.

Giovanni Bautista de Grimaldo, un artillero genovés, presente en la toma de Tenochtitlan a quien se le asignó una encomienda en Pánuco y se avecindó en Colima.

Juan Siciliano, artillero combatiente en 1521 y dueño de una rica mina de plata en Pachuca llamada ´La siciliana’ en cuyo hundimiento falleció.

Conseguiremos más datos para llegar a la ciudad de Ravelo, ellos le dicen Ravello, donde se observa la isla denominada Capri y Ana Capri, sobre la costa Amalfitana. Entre Sorrento y Nápoles, frente al Vesubio.

En breve.

craveloygalindo@gmail.com

 


Yo te bendigo vida
19 de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Lo que hizo famoso a Nervo fue su poesía.

Incursionó en lo que, sin ser un movimiento, llamó “modernismo”, una desarticulada corriente poética tendiente a liberarse de las ataduras del pasado e incursionar en temas antes evadidos, entre ellos el erotismo.

Y tuvo tal éxito, que a los recitales asistían en multitud tanto los cultos como los analfabetos porque en sus versos “la belleza de los vocablos subordina por entero la fuerza de los significados”.

Es decir, son rimas agradables, digan lo que digan.

Recordemos al bardo Amado Nervo. Y que mejor que transcribir lo que nos platican en Pátinas del Tiempo.

Yo te bendigo, vida es un libro ilustrado con fotografías propiedad de la familia Padilla Nervo. La primera de ellas data de 1870, año en que nació el personaje, y aparece en brazos de quien parece ser la nana Juliana, una mujer autóctona de la región.

Él era descendiente de españoles.

Este tecleador es su lector frecuente, nos explica don José Antonio Aspiros Villagómez.

Nervo murió el 24 de mayo de 1919 cerca de los 49 años en Montevideo, y su cadáver llegó a México seis meses después. Multitudes le rindieron homenaje a su paso por diversos países y aquí mismo.

El Congreso de Uruguay lo designó “príncipe de los poetas continentales” y, como “la memoria (…) elige a unos cuantos escritores y los vuelve figuras trascendentales”, el “canon poético” los convierte, a su muerte, en objeto de la gratitud de la nación, con solemnes honras fúnebres, nombramientos de hijo predilecto y lugares con su nombre.

Hace un año (24 de mayo de 2019) se cumplió un siglo de la muerte de Amado Nervo, y el próximo 27 de agosto será recordado en el ámbito culto de México, en el sesquicentenario de su nacimiento.

Nos fue preciso recurrir a la siempre útil Enciclopedia de México para determinar si Nervo fue nayarita como se le considera comúnmente pues, cuando nació en 1870, su natal Tepic había dejado de ser un cantón del estado de Jalisco para convertirse, por acuerdo de Benito Juárez, en un distrito militar, y luego en Territorio de Tepic bajo la presidencia de Manuel González.

El estado de Nayarit fue creado en 1917 a propuesta de Venustiano Carranza, apenas dos años antes de la muerte del famoso bardo. Eu su obra, Monsiváis usa apropiadamente el gentilicio tepiqueño, no nayarita.

En Yo te bendigo, vida, (primera edición en Ediciones Proceso, 2019, 189 páginas), su autor Carlos Monsivais, trata sobre la educación provinciana de Amado Nervo, quien aprendió con libros que todavía siete décadas después conocimos, tales como el Silabario de San Miguel y el Catecismo del padre Ripalda, además del Manual de Carreño sobre urbanidad.

Tenía 24 años cuando viajó a la capital del país y, sin dejar de valorar el conservadurismo provinciano pese al triunfo militar de los liberales, su formación y desarrollo se dieron en las ciudades de México, París y Madrid. Estos antecedentes influyeron en sus escritos, tanto periodísticos como literarios.

En las páginas de este libro también se abordan las temáticas preferidas por Nervo: su asombro por la “gran ciudad” de México y los encuentros y desencuentros del amor y la felicidad, y sus conceptos sobre París desde donde colaboraba con diarios mexicanos, incluidos sus anticlimáticos elogios a la torre Eiffel en 1900, cuando estaba amenazada de desmantelamiento.

En Europa, Nervo se dedicó a la bohemia antes de ingresar en 1905 al servicio diplomático sin dejar el periodismo, y en 1910 se le prohibió escribir de política después de que en un artículo sugirió que el rey Alfonso XIII de España debería visitar México durante las fiestas del Centenario.

Pero se mantuvo en la diplomacia porque fue sucesivamente porfirista, maderista, huertista y carrancista. Institucional. Estuvo en la embajada en Madrid hasta que Venustiano Carranza lo retiró, pero después lo hizo ministro plenipotenciario en Argentina, Uruguay y Paraguay donde, ya enfermo, fue recibido con homenajes, brindis y recitales.

Nervo vivió durante casi once años con Ana Cecilia Luisa Dailliez, a escondidas por no estar sujetos a ninguna ley, según dejó constancia en La amada inmóvil, sentido libro escrito tras la muerte de ella en 1912, víctima de la fiebre tifoidea.

craveloygalindo@gmail.com

 


De expertos sobre mujeres famosas de la historia
18 de mayo de 2020

}

Carlos Ravelo Galindo, afirma:


Pero antes una tapa de España.


 Francisco Gómez de Quevedo Villegas y Santibáñez Cevallos, conocido como Francisco de Quevedo, fue un escritor español del Siglo de Oro. Wikipedia


Fecha de nacimiento: 14 de septiembre de 1580, Madrid, España


Fallecimiento: 8 de septiembre de 1645, Villanueva de los Infantes, España
Lengua de producción literaria: Castellano
Géneros‎: ‎Poesía‎, ‎novela‎, novela picaresca.
‎Conceptismo: ‎La vida del Buscón. ‎Torre de Juan Abad. ‎Villanueva de los Infantes.
Cuentan que el poeta madrileño Quevedo cuando regresaba a su casa después de sus juergas nocturnas, siempre se detenía a orinar fuera del mismo edificio.


Un día, una dama indignada que ahí vivía, puso una cruz para intentar disuadirlo. Pero de nada sirvió.


Entonces le agregó a la cruz un letrero: “No se mea donde hay cruces”.


Tampoco funcionó. E incluso el escritor replicó:


“No se ponen cruces donde se mea”


El punto de partida de muchos poemas de Quevedo pueden ser unos versos de un autor clásico, una expresión que se recrea, una alusión a un pre-texto poético que transforma y emula al escritor que los produjo.


Se crea así una especie de diálogo entre un autor y sus predecesores a los que intenta superar.

Retirado en la paz de estos desiertos
con pocos, pero doctos libros juntos,
vivo en conversación con los difuntos
y escucho con mis ojos a los muertos.

Si no siempre entendidos, siempre abiertos,
o enmiendan o fecundan mis asuntos,
y en músicos callados contrapuntos
al sueño de la vida hablan despiertos.

Las grandes almas que la muerte ausenta,
de injurias de los años, vengadora,
libra, ¡oh gran don Iosef!, docta la emprenta.

En fuga irreparable huye la hora,
pero aquella el mejor cálculo cuenta
que en la lección y estudio nos mejora.

Y ahora de otros escritores.


De VIRGILIO ARIAS


Maestro Buenas tardes.


Magnífica reseña de la ilustre Hipatia de Alejandría, víctima del monje Cirilo.


Es la triste historia de muchos pueblos que han vivido en las tinieblas del saber y cayeron en el fanatismo irracional.


Es una de las mujeres que admiro, y a la distancia y circunstancias de la época, algo parecido sucedió con la Doncella de Orleans Juana de Arco (1412-1431), la virtuosa y culta Sor Juana Inés de la Cruz (1651-1695), y la bella y patriota Leona Vicario (1789-1842), quien le contestó con magnífica ironía a Lucas Alamán, quien era partidario de un nuevo rey en México. A distancia, fuerte abrazo Maestro.


De JOSE ANTONIO ASPIROS


Interesante tema, estimado amigo.


Seguramente sí sea Hipatia la mujer "más destacada" de Alejandría, pero nadie dudaría de que Cleopatra es la más conocida y su papel protagónico fue determinante en la historia universal.


Y las dos murieron de forma dramática.


Como sea, hay vasos comunicantes entre ambas: Cleopatra fue la última reina de Egipto perteneciente a la dinastía griega, Ptolomeo y que duró unos 300 años.


El primero de ellos, Ptolomeo I Sóter, fue el creador del Museo y de la Biblioteca de Alejandría donde estudió Hipatia y trabajó su padre.


De esa manera, Hipatia se convirtió en uno de los grandes sabios que se formaron en ese Museo, que no era como los de hoy donde se exhiben objetos, sino un centro académico de formación científica e intelectual con el apoyo de los miles de libros (rollos de papiro) que llegó a haber en la Biblioteca.


Y algo más: aquel Ptolomeo I -que por lo dicho se deduce que era muy culto- se apoderó del cadáver de Alejandro Magno, fundador de Alejandría, cuando era transportado de Babilonia a Macedona, y lo llevó a la entonces capital egipcia.


Hasta la fecha no han aparecido esos restos, pero leí alguna vez que podrían ser los que fueron llevados a Venecia con la creencia de que eran los de san Marcos. Que conste que todo esto es producto de mis lecturas y mi interés por la Historia, y no porque yo sea historiador. Salud. A.


De RUSIA MAC GREGOR GONZALEZ


Hipatia.


Cuántas veces escuché su nombre. Nunca indagué más allá. Ahora complemento su historia con lo que señalas en tus Nubes y los comentarios de nuestros hermanos Virgilio y José Antonio.


Todos los días aprendo mucho de ustedes.


Besos y un fuerte abrazo.


         Y de YOLANDA GOMEZ COBIAN


Hola Buenos días. 


Justo leo tu escrito el día de hoy.


Te comento que estoy con la historia de las primeras civilizaciones.


 Este es un libro de Rodolfo Benavides cuyo tema es la cultura egipcia de hace 5000 años y la relaciona con las Mayas, griegos, incas, sumerios, caldeos. 


Todo lo que mencionas suena muy interesante relacionado a los escritos ancestrales que son parte de nuestro origen.


 El autor menciona que por el año 7256, adc, llegó a Egipto, de una isla lejana un personaje que le llamaron “Thoth”. Enseñó a los nativos artes, ciencias, filosofía, religión, escritura, matemáticas, astronomía, música, medicina, metalurgia, etcétera.


 De modo muy semejante a lo que hizo Quetzalcóatl o Kukulcán en América y Krishna en India.  


Deja de manifiesto:


“Lo que está arriba es igual a lo que está abajo y lo que está abajo es idéntico a lo que está arriba, todo, para realizar las maravillas del Único.


Puesto que todas las cosas existen debido a la voluntad del Único, tienen consecuentemente su origen en la cosa Única.”


Como ves por el concepto de hace tantos años. Definitivamente eran seres superiores.


Te mando mi cariño, Yolis.


Claro que, al leerlos, aprende uno más, y mejor.

craveloygalindo@gmail.com

 
De expertos sobre mujeres famosas de la historia
18 de mayo de 2020

}

Carlos Ravelo Galindo, afirma:


Pero antes una tapa de España.


 Francisco Gómez de Quevedo Villegas y Santibáñez Cevallos, conocido como Francisco de Quevedo, fue un escritor español del Siglo de Oro. Wikipedia


Fecha de nacimiento: 14 de septiembre de 1580, Madrid, España


Fallecimiento: 8 de septiembre de 1645, Villanueva de los Infantes, España
Lengua de producción literaria: Castellano
Géneros‎: ‎Poesía‎, ‎novela‎, novela picaresca.
‎Conceptismo: ‎La vida del Buscón. ‎Torre de Juan Abad. ‎Villanueva de los Infantes.
Cuentan que el poeta madrileño Quevedo cuando regresaba a su casa después de sus juergas nocturnas, siempre se detenía a orinar fuera del mismo edificio.


Un día, una dama indignada que ahí vivía, puso una cruz para intentar disuadirlo. Pero de nada sirvió.


Entonces le agregó a la cruz un letrero: “No se mea donde hay cruces”.


Tampoco funcionó. E incluso el escritor replicó:


“No se ponen cruces donde se mea”


El punto de partida de muchos poemas de Quevedo pueden ser unos versos de un autor clásico, una expresión que se recrea, una alusión a un pre-texto poético que transforma y emula al escritor que los produjo.


Se crea así una especie de diálogo entre un autor y sus predecesores a los que intenta superar.

Retirado en la paz de estos desiertos
con pocos, pero doctos libros juntos,
vivo en conversación con los difuntos
y escucho con mis ojos a los muertos.

Si no siempre entendidos, siempre abiertos,
o enmiendan o fecundan mis asuntos,
y en músicos callados contrapuntos
al sueño de la vida hablan despiertos.

Las grandes almas que la muerte ausenta,
de injurias de los años, vengadora,
libra, ¡oh gran don Iosef!, docta la emprenta.

En fuga irreparable huye la hora,
pero aquella el mejor cálculo cuenta
que en la lección y estudio nos mejora.

Y ahora de otros escritores.


De VIRGILIO ARIAS


Maestro Buenas tardes.


Magnífica reseña de la ilustre Hipatia de Alejandría, víctima del monje Cirilo.


Es la triste historia de muchos pueblos que han vivido en las tinieblas del saber y cayeron en el fanatismo irracional.


Es una de las mujeres que admiro, y a la distancia y circunstancias de la época, algo parecido sucedió con la Doncella de Orleans Juana de Arco (1412-1431), la virtuosa y culta Sor Juana Inés de la Cruz (1651-1695), y la bella y patriota Leona Vicario (1789-1842), quien le contestó con magnífica ironía a Lucas Alamán, quien era partidario de un nuevo rey en México. A distancia, fuerte abrazo Maestro.


De JOSE ANTONIO ASPIROS


Interesante tema, estimado amigo.


Seguramente sí sea Hipatia la mujer "más destacada" de Alejandría, pero nadie dudaría de que Cleopatra es la más conocida y su papel protagónico fue determinante en la historia universal.


Y las dos murieron de forma dramática.


Como sea, hay vasos comunicantes entre ambas: Cleopatra fue la última reina de Egipto perteneciente a la dinastía griega, Ptolomeo y que duró unos 300 años.


El primero de ellos, Ptolomeo I Sóter, fue el creador del Museo y de la Biblioteca de Alejandría donde estudió Hipatia y trabajó su padre.


De esa manera, Hipatia se convirtió en uno de los grandes sabios que se formaron en ese Museo, que no era como los de hoy donde se exhiben objetos, sino un centro académico de formación científica e intelectual con el apoyo de los miles de libros (rollos de papiro) que llegó a haber en la Biblioteca.


Y algo más: aquel Ptolomeo I -que por lo dicho se deduce que era muy culto- se apoderó del cadáver de Alejandro Magno, fundador de Alejandría, cuando era transportado de Babilonia a Macedona, y lo llevó a la entonces capital egipcia.


Hasta la fecha no han aparecido esos restos, pero leí alguna vez que podrían ser los que fueron llevados a Venecia con la creencia de que eran los de san Marcos. Que conste que todo esto es producto de mis lecturas y mi interés por la Historia, y no porque yo sea historiador. Salud. A.


De RUSIA MAC GREGOR GONZALEZ


Hipatia.


Cuántas veces escuché su nombre. Nunca indagué más allá. Ahora complemento su historia con lo que señalas en tus Nubes y los comentarios de nuestros hermanos Virgilio y José Antonio.


Todos los días aprendo mucho de ustedes.


Besos y un fuerte abrazo.


         Y de YOLANDA GOMEZ COBIAN


Hola Buenos días. 


Justo leo tu escrito el día de hoy.


Te comento que estoy con la historia de las primeras civilizaciones.


 Este es un libro de Rodolfo Benavides cuyo tema es la cultura egipcia de hace 5000 años y la relaciona con las Mayas, griegos, incas, sumerios, caldeos. 


Todo lo que mencionas suena muy interesante relacionado a los escritos ancestrales que son parte de nuestro origen.


 El autor menciona que por el año 7256, adc, llegó a Egipto, de una isla lejana un personaje que le llamaron “Thoth”. Enseñó a los nativos artes, ciencias, filosofía, religión, escritura, matemáticas, astronomía, música, medicina, metalurgia, etcétera.


 De modo muy semejante a lo que hizo Quetzalcóatl o Kukulcán en América y Krishna en India.  


Deja de manifiesto:


“Lo que está arriba es igual a lo que está abajo y lo que está abajo es idéntico a lo que está arriba, todo, para realizar las maravillas del Único.


Puesto que todas las cosas existen debido a la voluntad del Único, tienen consecuentemente su origen en la cosa Única.”


Como ves por el concepto de hace tantos años. Definitivamente eran seres superiores.


Te mando mi cariño, Yolis.


Claro que, al leerlos, aprende uno más, y mejor.

craveloygalindo@gmail.com

 
De chile, de dulce y de manteca
15 de mayo de 2020

}

Carlos Ravelo Galindo, afirma:

El personal de carrera es permanente y su desempeño se basa en los principios de preparación, competencia, capacidad y superación constante, a fin de establecer un servicio profesional para la ejecución de la política exterior de México.

Lo que nos platica nuestro amigo embajador Antonio Pérez Manzano no tiene desperdicio.

Y dígame si no son de chile, de dulce y de manteca.

“En cierta ocasión un alumno Universitario me preguntó:

¿Qué clase de embajador es usted?

Soy embajador de México de tercera clase y estoy jubilado.

En el Servicio Exterior Mexicano entre los embajadores hay varias clases o categorías:

Para ilustrar lo anterior, comparto una anécdota:

Hace poco tiempo me reuní con unos compañeros del Servicio Exterior Mexicano (SEM), con quienes pasamos un rato agradable hablando de lo bueno y lo no tan bueno de nuestra vida en el campo profesional; así como sobre la situación de jubilados, en la que ahora nos encontramos disfrutando después de décadas de servicio.

Entre las cosas de las que comentamos salió el caso de un colega que “se decía embajador” y uno de los contertulios le preguntaba: ¿fuiste embajador? ¿Ante quién presentaste cartas credenciales? Dichas interrogantes dieron paso a una serie de comentarios en torno a nuestras carreras.

Desde luego estoy muy orgulloso, por haber logrado con base en estudios, preparación, capacitación y méritos en el ejercicio de la profesión, los ascensos necesarios por medio de concursos públicos -para llegado el momento y de acuerdo con la Ley del SEM-, recibir el nombramiento de embajador de México.

Cabe hacer notar que, cuando hablamos de embajador de carrera, significa que alcanzó ese nivel de acuerdo con sus méritos reconocidos y compensados con un nombramiento, avanzando escalón por escalón hasta alcanzar el grado máximo.

Muchos llegamos a la edad de la jubilación sin haber sido adscritos como jefe de misión a una embajada para representar al Estado Mexicano, ante el gobierno de otro Estado o bien, para

desempeñar las muy honrosas labores consulares en la categoría más alta, como cónsul general.

Otros –los menos favorecidos-, subieron penosamente por la escalera, algunos más nos hicimos viejos en el camino y nos llegó la edad de la jubilación.

La Ley es tajante: Baja del SEM por jubilación al cumplir 65 años de edad (recientemente se modificó la Ley y ahora será a los 70 años).

No obstante, como en todo hay excepciones, si “el dedo del Señor” le concede un nombramiento que lo mantenga en activo no importa la edad.

Al final del camino, para los efectos de la pensión pareciera que todos los embajadores somos “iguales”, pero eso no es así, unos son más iguales que otros, con lo cual se crean cuando menos tres categorías de embajadores, que en algún momento se podrían equiparar con los máximos rangos del Ejército Mexicano, como son:

A. General de División (3 estrellas); B. General de Brigada (Ejército) o General de Ala (Fuerza Aérea) (2 estrellas); C. General Brigadier (Ejército) o General de Grupo (Fuerza Aérea) (1 estrella).

En el caso del Servicio Exterior Mexicano son:

A. Eméritos: Artículo 25.

El Presidente de la República podrá reconocer la dignidad de embajador emérito como culminación de una destacada y ser embajador, retirado o en servicio activo, que haya dedicado por lo menos 25 años al Servicio Exterior y se haya distinguido por haber ocupado cargos de importancia en el Servicio Exterior o en la Secretaría, por sus obras escritas sobre temas internacionales, o por haber prestado otros servicios destacados en el campo de las relaciones internacionales de México, por lo menos con diez años de servicio y haber ocupado el cargo de Secretario.

B. Eminentes. Artículo 24.

Dentro del rango de Embajador habrá un máximo de diez plazas de embajador eminente, como distinción a los miembros de ese rango por su actuación destacada de servicio al país en el ámbito de la política exterior.

Para cubrir una vacante de embajador eminente, el Secretario someterá a la consideración del Presidente de la República los nombres y antecedentes de aquellas personas que tengan una antigüedad mínima de diez años como embajador y que hayan ocupado cargos de Director General o superiores en la Secretaría

La segunda clase es la de los embajadores que por recomendación del secretario de relaciones son designados por el presidente de la República para representar a México ante el gobierno de otro Estado, o bien, ante un organismo internacional.

En esta misma clasificación también se producen ascensos y designaciones en los mejores puestos dependiendo de méritos, o bien, del grado de conexiones o amistades a las que el funcionario puede recurrir para apoyarse; lo cual se refleja en la cantidad de años necesarios para alcanzar el rango máximo de la carrera diplomática.

Al respecto, viene al caso comentar que, en la historia reciente del SEM que, -aprovechar ciertas imprecisiones o vacíos en la Ley correspondiente-, un grupo muy unido de compañeros logró saltar una categoría, para mediante un procedimiento legal ser ascendidos de “cónsul de primera” a “cónsul general” y de ahí a la homologación con el rango de embajador.

Ha existido una especie de “dinastía” de diplomáticos, quienes orgullosos de ostentar apellidos ilustres, también han tratado de “depurar el servicio” de diferentes maneras, en complicidad con funcionarios gubernamentales y legisladores, que han aprobado leyes y reglamentos a modo, para impedir o retrasar los ascensos de un buen número de funcionarios, sin importar que demostraran una preparación permanente, actualización de conocimientos y méritos en el trabajo.

En el lado opuesto impulsaron a otros funcionarios quienes llegaron a obtener tres o cuatro ascensos en tres años, cuando en términos generales se debería de tener una antigüedad mínima de 2 años para tener derecho a concursar.

Conozco a un funcionario que tuvo que presentó hasta 10 veces los exámenes para ascenso en una categoría y en cada ocasión recibía la misma respuesta: “usted aprobó el examen, pero no alcanzó plaza.”

La tercera clase de embajadores la representan los funcionarios que logrado el ascenso a ministro del SEM por concurso público, o por nombramiento discrecional del secretario de relaciones exteriores -pero que llegaron a los 65 años sin que hubiera una plaza de embajador en algún país que pudiera ocupar-.

En ese caso, pasa irremediablemente a “disfrutar de los beneficios de la jubilación” y su pensión alcanzará el máximo otorgado en dicha categoría.

En esa situación fue que, el que esto escribe causó baja del SEM con la categoría de embajador (de tercera), equiparable a un general brigadier del Ejército Mexicano, con una estrella.

Como todo mundo sabe, existen los llamados “embajadores políticos” designados discrecionalmente por el Jefe de Estado, que de acuerdo con el Artículo XV de la Ley del SEM, pasan a ser miembros del Servicio Exterior de manera temporal.

Significa que no son considerados como personal de carrera.

El Servicio Exterior se integra por personal de carrera, personal temporal y personal asimilado y comprende las ramas diplomático-consular y técnico-administrativa.

En esta categoría se acomodan los embajadores y cónsules nombrados por el jefe del Poder Ejecutivo.

Tema que abordaré en futuros artículos. Nos ofrece don

craveloygalindo@gmail.com

 


De dos viudos. Y la lengua de un genio
14 de mayo de 2020

}

Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Platico la historia que publica el The New York Times.

“Como para el amor no hay edades ni barreras, la danesa Inga Rasmussen de 85 años y el agricultor alemán Karsten Tüchsen Hansen, de 89, decidieron seguir su romance a pesar del cierre de fronteras entre Alemania y Dinamarca.

Ella maneja al punto fronterizo de Mollehusvej. Lleva café y una mesa.

El en su bicicleta eléctrica, sillas y bebidas.

Viudos ambos, no pensaban volver a tener pareja.

Se ven todas las tardes, sentados cada uno de su lado y a una distancia de dos metros.

“Jamás soñé vivir algo semejante” declaró el casi nonagenario novio y lamentó “lo malo es que no podemos abrazarnos, besarnos, ni hacer el amor.”

Por ello amemos a un ser mortal como si fuese inmortal: La mujer.

El amor nace de un flechazo; la amistad del intercambio frecuente y prolongado. El amor es instantáneo; la amistad requiere tiempo.

No hay un sentimiento más fuerte en la tierra que el amor y todos lo hemos sentido.

A veces apreciamos que el amor no puede resistir la prueba del tiempo, especialmente en esta época en que las tentaciones y las distracciones pueden ocupar un lugar central.

Pero para el amor no hay edad. Las revoluciones del siglo XX fueron y son, justamente, el semillero de las democracias. Y la de hoy, siglo XXI, del respeto a quien nos dio la vida, sin pedirnos algo.

Han sido una cruel respuesta de la historia de las predicciones de Marx:

La revolución que acabaría con el Estado no sólo lo ha fortalecido, sino que ha creado un grupo social que es, a un tiempo, su criatura y su propietario.

Amar es combatir, es abrir puertas, dejar de ser fantasma con un número a perpetua condenado por un amo sin rostro.

La poesía nos hace tocar lo impalpable y escuchar la marea del silencio que cubre un paisaje devastado por el insomnio.

Una sociedad poseída por el frenesí de producir más para consumir más tiende a convertir las ideas, los sentimientos, el arte, el amor, la amistad y las personas mismas en objetos de consumo.

Más difícil que despreciar al dinero es resistir a la tentación de hacer obras o de transformarse uno mismo en obra.

Insistimos: Amemos a un ser mortal como si fuese inmortal: La mujer.

Y enseñemos la lengua a quien lo dude.

Albert Einstein sacó la lengua, 1951, en Nueva Jersey.

La historia de la fotografía, que se convirtió en una de las más famosas de Albert Einstein, fue tomada el 14 de marzo de 1951, mientras el físico ganador del premio Nobel abandonaba un evento celebrado en honor a su 72 cumpleaños en Princeton, Nueva Jersey. Unos pocos fotógrafos siguieron a Einstein, para obtener una buena imagen.

Artur Sasse, el hombre detrás del famoso disparo, esperó hasta que la mayoría de ellos se dispersaron, luego caminó hacia el auto.

Esperó al científico y le dijo: "Profesor, sonríe por tu foto de cumpleaños".

En lugar de sonreír, Einstein sacó la lengua. No creía que Sasse fuera lo suficientemente rápido como para capturar el momento.

Algunos de los editores se mostraron reacios a publicar la imagen, pero finalmente fue aprobada y pasó a la historia.

Einstein ya tenía fama de ser un poco extraño, y la imagen lúdica estableció aún más su opinión pública como un encantador profesor chiflado.

Al propio Einstein le gustó tanto la imagen que solicitó a UPI que le enviara 9 copias para uso personal, una de las cuales firmó para un reportero.

En 2009, la copia original firmada se vendió en una subasta por $ 74,324 dólares.

Insistimos: Amemos a un ser mortal como si fuese inmortal: La mujer.

Y enseñemos la lengua a quien lo dude.

craveloygalindo@gmail.com

 


Las culturas más influyentes
13 de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma:

La influencia que ejerce un país, una nación, o más ampliamente un tipo de cultura suele valorarse en función de lo extendido que esté su poder militar, político y económico.

Sin embargo, hay países que llegan lejos e influyen en otros pueblos de otra manera, con la fuerza de la cultura: su comida, su moda o su entrenamiento

Un dominio web estadounidense elaboró recientemente una lista con los países con culturas más influyentes en el mundo, basada no en factores de poder, sino en factores como la percepción que se tiene de ellos en otros países.

El prestigio, la modernidad, la creatividad, la satisfacción y felicidad de los habitantes, el patrimonio artístico o el ocio y entretenimiento.

La mayoría de los 10 primeros colocados están en Europa: Italia, España, Francia y Reino Unido.

También encontramos en la lista países de otros continentes, como Japón (considerado moderno y prestigioso), Brasil (por su población feliz y su entretenimiento) y Estados Unidos (por ser moderno y por su cultura). Y México por su comida.

Presentamos los 5 países con culturas más influyentes del mundo en la actualidad y por qué.

Italia

Con marcas de diseñadores mundialmente conocidos como Valentino, Armani, Versace y Gucci, Italia encabeza la lista con un rotundo 10, tanto por estar a la moda como por ser moderno, a pesar de que es uno de los países con más maravillosos restos conservados del pasado.

¡No podemos pensar en una mejor combinación!

A los italianos nos importa la imagen, verse bien, tienen más cuidado que la mayoría para ir a la moda.

Italia ha tenido un gran impacto en todo lo que tiene que ver con estilo, desde comida, prendas de vestir y complementos, autos hasta muebles. Y qué decir de la mujer.

FRANCIA

Es un país percibido como realmente moderno, prestigioso y a la moda fuera de sus fronteras, y con un toque misterioso y elegante que gusta, un “no sé qué”.

No es extraño que viajeros incluso por lugares muy remotos de Oriente Medio y Asia se encuentren con personas que adoran y se inspiran en la comida, la literatura, el arte o la moda francesa.

Uno de los embajadores estrella de esta cultura fuera de su entorno es el vino, como el que exportan desde Bordeaux.

Los franceses están extremadamente orgullosos de que su identidad haya sido una de las que ha dado forma al mundo, y esto incluye ser muy celosos de su idioma.

La mayoría de la gente en Francia no habla inglés, o habla mal inglés, pero no les gusta hacerlo.

Estados Unidos

A nivel de entretenimiento, la industria cultural americana es una apisonadora, todos conocemos sus películas, programas pioneros de televisión cuyos formatos son imitados después en otros países, sus series o la música de actualidad globalmente.

Todo ello influye en cómo hablamos, cómo nos vestimos, lo que miramos y quiénes somos.

También deja una gran impronta cultural su sector tecnológico, ya que es hogar de Facebook, Twitter, Google y Amazon, servicios y redes sociales muy populares utilizadas cada día por millones de personas. Cómo no mencionar una de las claves de la identidad estadounidense, “el sueño americano”, sobre la posibilidad de soñar más allá de los humildes comienzos, y su gran diversidad geográfica y social.

España

Fue uno de los mayores imperios, extendido por una vasta geografía, lo cual ha contribuido a que sea aun actualmente la segunda lengua más hablada en el mundo como lengua materna.

La fuerza de sus artistas, películas, televisión y música ayuda a colocarla entre los países líderes en influencia cultural, unido a su carácter tan especial.

Desde el idioma a la religión, la cocina, los festivales y muchos otros aspectos, es fácil encontrar algo con inspiración española al viajar a cualquier parte, especialmente la cultura de las tapas, extendida internacionalmente.

La comida en España es una forma de vida, que va unida a compartir con la familia, amigos o con un grupo de extraños que te rodean, pero con los que por qué no acabar manteniendo una amigable charla.

Este tipo de socialización es clave en un país que pone a la familia y amigos antes qué al trabajo, donde los largos almuerzos y las reuniones familiares son costumbre.

No es extraño oír a un español decir “trabajamos para vivir, no vivimos para trabajar”, y no es extraño ver bares llenos día tras día. cualquier forma

Reino Unido

Ocupa un lugar alto en cuanto a prestigio internacional, y sus residentes están orgullosos de su combinación de ética laboral, creatividad y capacidad de innovación.

Todo ello se ve reflejado en que tienen algunas de las mejores universidades del mundo y un don privilegiado para el emprendimiento. A pesar de que muchos de los extranjeros que han ido a vivir a Reino Unido cuentan que no siempre dicen lo que quieren y que hay

que aprender a leer entre líneas e interpretar los matices y el lenguaje corporal (por ejemplo "'no estoy seguro'" a menudo quiere decir 'no')

México

Nos distinguen por nuestra cordialidad y buen trato. Las playas. Y los mejores tacos de cochinita. Salud.

craveloygalindo@gmail.com

 


Procuremos ser buenos hijos
11 de mayo de 2020

}

Carlos Ravelo Galindo, afirma:


A nuestros escasos 90 años de vida nada más justo que recordar a diario, pero hoy más que nunca, a las mujeres que han dado vida en el mundo.


 En primera persona a María Teresa, nuestra madre.


 A Bety, por mis cuatro hijos.


A mis nueras por mis diez nietos.


Y a mis nietas por mis nueve bisnietos.


Esperamos conocer, palabra, a nuestros choznos.


Y llegar como don F a celebrar, este año, su 104 aniversario, allá en San Juan del Rio, Querétaro. Donde vive con sus hijos.


Y después de este breviario cultural como homenaje a todas, a todas las madres la canción que nuestro hijo Jorge Alberto Ravelo Reyes cantó hace 54 años, cuando tenía seis, a su mamá Bety.


Fue en la pre primaria del Instituto Cumbres, de Rosedal 50, y era su maestra la madre María Luisa.


Con el entusiasmo como lo hizo entonces y lo hace todavía, a sus 60, como abogado egresado de la Anáhuac, nosotros la cantamos a ellas.

Madrecita del alma querida
En mi pecho yo llevo una flor
No te importe el color que ella tenga
Porque al fin tú eres, madre, una flor

Tu cariño es mi bien, madrecita
En mi vida tú has sido y serás
El refugio de todas mis penas
Y la cuna de amor y verdad

Aunque amores yo tenga en la vida
Que me llenen de felicidad
Como el tuyo jamás, madre mía
Como el tuyo no habré de encontrar

Aún recordamos con alegría su vocecita que este día la compartimos con todas las que han dado vida en este mundo.


 Y un consejo de una abuela, con algo de gracia.


En su día con devoción.


Un predicador cuya esposa esperaba un bebé, fue ante la congregación y pidió un aumento.


Luego de mucha discusión, aprobaron una regla: cada vez que la familia del hombre se expandiera, también lo haría su cheque de pago.


 Después de 6 niños, esto comenzó a ser bastante costoso y la Congregación decidió celebrar otra reunión para discutir el salario del pastor.


Hubo mucha molestia y disputas sobre cuánto le costaban a la iglesia los hijos adicionales del orador.


 Finalmente, el Pastor se levantó y habló a la multitud:


"Los niños son un regalo de Dios", dijo.


Entonces la asistencia quedó en silencio total.


En el banco de atrás, había una viejecita que se puso de pie y con su voz débil dijo:


 "La lluvia también es un regalo de Dios, pero cuando recibimos demasiada, entonces nos ponemos botas".


Y la congregación dijo: "Amén".


 craveloygalindo@gmail.com

 

Los cavernícolas leían en braille
08 de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Tanto para Oriente como para Occidente, el libro es “una expresión de la memoria que vincula a cada generación en la primera red social contra la amnesia”.

Y como máquina para pensar es un peligro para los tiranos.

En Lecturas con pátina nos hablan de Cinco mil años de libros, antes de Gutenberg.

Y de Fernando Báez, reconocido como una autoridad mundial en materia de historia de las bibliotecas.

En los primeros libros de la humanidad (Editorial Océano, 2015, 508 páginas), este escritor que recorrió 22 países para documentar su trabajo, resume magistralmente los muchos años que pasó metido en bibliotecas, archivos y zonas arqueológicas, donde habló con sus encargados y tomó su información además de valiosas fotografías que reproduce en su obra.

A su vez, la escritura es una “fascinante tecnología de la memoria” que fue creada -no como la conocemos- de manera independiente por cuatro civilizaciones en tres continentes y distintos momentos.

En su extenso y apasionante paseo por la historia del libro antes de la imprenta, se refiere al invento del alfabeto, los primeros libros, la existencia de los escribas, a las más antiguas bibliotecas miles de años antes de nuestra era, y a la persecución, destrucción o expolio de obras valiosas.

Pero dejemos que el autor de Lecturas con Pátina, sí el licenciado, escritor, historiados y buen colega-amigo, don Antonio Aspiros Villagómez nos auxilie en el relato.

Todo el saber humano: desde letras de canciones populares y recetas de cocina, hasta las más importantes teorías y descubrimientos sobre los misterios de la vida y el Universo, están en los libros. Todo.

Y no sólo en los libros que se publicaron a partir de la imprenta que nos legaron los chinos y perfeccionó Gutenberg hace menos de seis siglos.

Sino también en los que fueron hechos durante los cinco mil años previos en piedra, madera, pieles, metal, papiro, amate, cuerdas anudadas o lo que tenían a su alcance las antiguas civilizaciones.

Se trata de libros manuscritos, es decir, hechos a mano, según un extenso relato del venezolano Fernando Báez, reconocido como una autoridad mundial en materia de historia de las bibliotecas.

En su extenso y apasionante paseo por la historia del libro antes de la imprenta, se refiere al invento del alfabeto, los primeros libros, la existencia de los escribas, a las más antiguas bibliotecas miles de años antes de nuestra era, y a la persecución, destrucción o expolio de obras valiosas.

Menciona que episodios bíblicos como lo del diluvio y los siete días de la Creación ya estaban relatados en tablillas encontradas en Nínive.

Recuerda que el concepto del alma partió de los egipcios, y comenta cuidadosamente que, al traducir los Evangelios del hebreo al griego, los escribas cambiaron “mujer joven” por “virgen”.

Ya en esos tiempos había correctores de textos en Judea y en Babilonia, y a los escribas que no denunciaran alguna errata en cualquier copia de la Torá, se les podía considerar sospechosos de herejía.

En China, fueron destruidos los libros opuestos a los emperadores y enterraban vivos a quienes se oponían a ello.

Por su parte, como no sabía leer ni escribir, Mahoma pidió a compañeros suyos que redactaran las revelaciones del arcángel Gabriel.

En contraste, hace mil años los árabes publicaron un tratado sobre caligrafía y el uso del cálamo con pulcritud.

Báez también investigó la historia de los libros primitivos en África, y señala en su obra cómo Mali fue un importante centro de intercambio cultural, y que en Tombuctú los musulmanes alfabetizaron a la gente y crearon una escuela de escribas y la primera universidad del mundo.

Es fascinante su relato sobre los libros en la Edad Media, desde que una bibliotecaria salvó de ser destruidos por los bárbaros los que había en el monasterio de San Galo.

Fueron privilegiados los llamados textos sagrados, Carlomagno animó a los obispos a crear bibliotecas y escuelas de copistas, y se prefirió el pergamino para escribir.

El obispo Zumárraga -quien se dedicaba en España a examinar casos de brujería y practicar exorcismos- vio en los códices figuras mágicas, hechicerías y demonios, y ordenó destruirlos incluidos los de Texcoco, lugar considerado la Atenas de México.

En la zona maya, Diego de Landa continuó la labor de Zumárraga e hizo quemar cinco mil ídolos y 27 códices porque tenían “superstición y falsedades del demonio”.

Torquemada denunció que los libros quemados por Zumárraga eran “de mucha importancia para saber las cosas antiguas de esta tierra”.

Algunos mayas escondieron parte de esos documentos, y por eso ahora se tiene noticia de ellos.

De esa furia redentora sobrevivieron tres códices prehispánicos, que fueron despojados y están en Alemania, Francia y España.

Los nativos hicieron a escondidas nuevos códices, entre ellos el Popol Vuh, mientras que otros libros los tenían en la memoria al estilo de la novela Fahrenheit 451 de Ray Bradbury.

También a los incas, los conquistadores les destruyeron sus quipus (nudos) porque según los frailes eran -pretexto repetido- obra del diablo, cuando se trataba de documentos escritos en tres dimensiones y los 600 que se salvaron son los más antiguos del mundo en su especie.

Se leían de una manera táctil como en braille, y visual; los colores y material de las cuerdas tenían un significado, y hay la creencia de que su información es astronómica, económica e histórica.

Fueron los cavernícolas

craveloygalindo@gmail.com

 

Lo entendemos, coincidimos embajador
07 de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Cuando Occidente disfruta de los frutos de la ilustración, los mejores inventos de la revolución informática y las comunicaciones tienden a ser usados más como instrumentos de sometimiento y control social, que de liberación de los pueblos.

“El triunfo arrasador del movimiento encabezado por Andrés Manuel López Obrador en 2018, su larga y obstinada lucha por acceder al poder de manera pacífica en México, me animan a compartir estas reflexiones de una aciaga década en la historia reciente de nuestro país.

“Pero el movimiento que hizo posible esta hazaña está llamado a convertirse ya en un auténtico sujeto de poder transformador, de lo contrario Morena no estará a la altura de los desafíos de la transformación de un México que se debate en la descomposición.

“Morena, como todo auténtico movimiento de masas, requiere con urgencia la capacitación de sus bases y dirigencias para que, desde lo local y en todos los rincones del país, apoye y estimule la constructiva participación ciudadana en las transformaciones que el país reclama.

“Espero que estas reflexiones tengan eco entre los cada vez menos lectores, pero especialmente entre quienes están haciendo historia”.

Lo entendemos, coincidimos y lo compartimos, con entusiasmo don Antonio Pérez Manzano.

(Está en la introducción al libro “La verdad como justicia”, del también diplomático Atanacio Campos Miramontes. El autor se desempeña como Cónsul Adscrito en el Consulado General de México en Vancouver. La obra ha sido publicada por Editorial Porrúa, México. En agosto de 2019)

4 mayo, 2020 Antonio Pérez Manzano Obras Escritas y Artísticas, Pedagógicas 0

En los albores del siglo XX, el pensador ruso Vasili Vasiliévich Rozánov se preguntaba: “¿Con qué estamos recibiendo el nuevo siglo? – Es extraño decirlo, pero lo recibimos con un aburrimiento universal… hay un tedio definitivo en todo: en la ciencia, en las letras, en la vida social.”

(1) Fue justamente en ese tiempo que el mundo occidental emprendió una frenética búsqueda por huir del tedio, inventando toda suerte de artilugios llamados a inflamar las ilusiones. La radio y el cinematógrafo conquistaban la atención del amplio mundo.

Pocos años después, Lev Nikolaévich Tolstoi advertía en sus diarios que “todos los inventos de la civilización son cómodos e interesantes sólo al principio, luego terminan hartándonos.”

(2) Entre guerras, jolgorios, revoluciones, treguas, cataclismos, correrías, catástrofes y reconstrucciones, el hombre progresó durante todo el siglo XX; y cruzó el umbral del tercer milenio, convertido ya en todo un individuo, rodeado de una parafernalia infinita de invenciones y comodidades, pero igual que siempre, tratando de aliviar su soledad. Pareciera que, con los espectáculos y el turismo de masas, la televisión y ahora el internet, el individuo al fin alcanzaría el consuelo de comulgar con su prójimo. Pero no, en el siglo XXI “la gente [de Occidente] viaja al lugar [Chernóbil] en busca de nuevas y poderosas impresiones… La vida se vuelve aburrida. Y la gente quiere algo eterno,” advierte Svetlana Aleksiévich al final de su conmovedora plegaria de Chernóbil.

(3) En nuestros días, el ciudadano de las redes sociales contempla el mundo a través de lo que cree que son sus propios deseos, inflamando el narcisismo y exaltando el individualismo, para luego terminar fragmentando las identidades gregarias de su entorno social. El individuo huye de su comunidad real, pues no discierne ni soporta las complejas determinaciones sociales que sufre, pero al mismo tiempo no se aguanta en soledad y, en una suerte de escapismo, se “conecta” con una infinita comunidad virtual y, con el suave pulso de sus dedos, cree moldear la realidad a su antojo. Y sin embargo se aburre. La gente sigue inmersa en un tedio que lo devora todo.

Hace casi 600 años, la invención de la imprenta revolucionó la palabra escrita y el libro, y éste acercó a los hombres de distintas culturas y latitudes, convirtiéndose en la mejor arma de la ilustración, el momento estelar de la modernidad.

El libro se abrió paso en un mundo donde la inmensa mayoría no sabía leer ni escribir, y los insignes hombres no escatimaron sacrificio alguno por llevar luz al pueblo, que padecía la oscuridad de la ignorancia.

En cambio, ahora, cuando Occidente disfruta de los frutos de la ilustración, los mejores inventos de la revolución informática y las

comunicaciones tienden a ser usados más como instrumentos de sometimiento y control social, que de liberación de los pueblos.

En la condición posmoderna, paradójicamente, el bullicio sin fin, más temprano que tarde, se torna aburrimiento. Todos los días se producen series, películas, programas de toda laya, y los ya miles de millones de almas conectadas a la red hacen lo propio, engullendo porciones de tiempo que se antoja infinito en la escala de la vida humana.

Esto nos trajo la era post: el postmodernismo, el postcomunismo, el post humanismo, etc. y es natural cuestionarse si tiene algún sentido recopilar reflexiones que atendieron a problemáticas de años ya pasados. Estas cavilaciones y soliloquios fueron motivados por una época en la que la izquierda en general, ante nuevos desafíos y determinaciones sociales sumamente complejas, lejos de intentar entender, emprender nuevas búsquedas, y proponer alternativas trascendentes, optaba por acomodarse a una nueva realidad, abandonando su originaria vocación transformadora.

Desde el desmantelamiento de la Unión Soviética, la izquierda no hizo otra cosa que desmarcarse de las experiencias revolucionarias de la modernidad en toda su diversidad y complejidad histórica, y abjurar hasta de las mejores tradiciones socialistas. La izquierda institucionalizada se refugió en un discurso de lo políticamente correcto y, como todo renegado, terminó por abrazar el programa de su antípoda, la derecha.

En los últimos 30 años hubo que nadar a contracorriente y resistir el embate ideológico que decretó el fin de la historia.

La primera parte la conforman incursiones por las sendas de San Petersburgo a 300 años de su fundación. Los soliloquios son posicionamientos ante situaciones críticas en el México de los años recientes, en las que una izquierda ya institucionalizada buscaba siempre, ante todo, ser obsequiosa, acomodaticia y complaciente con el sistema que la había domesticado.

Sin embargo, en medio de la tragedia nacional, la izquierda también resistía y, cual Sísifo, intentó una y otra vez regenerarse.

En los años funestos del enseñoramiento de la canallada, gracias a los necios no murió la esperanza.

El triunfo arrasador del movimiento encabezado por Andrés Manuel López Obrador en 2018, su larga y obstinada lucha por acceder al poder de manera pacífica en México, me animan a

compartir estas reflexiones de una aciaga década en la historia reciente de nuestro país.

Pero el movimiento que hizo posible esta hazaña está llamado a convertirse ya en un auténtico sujeto de poder transformador, de lo contrario Morena no estará a la altura de los desafíos de la transformación de un México que se debate en la descomposición.

Morena, como todo auténtico movimiento de masas, requiere con urgencia la capacitación de sus bases y dirigencias para que, desde lo local y en todos los rincones del país, apoye y estimule la constructiva participación ciudadana en las transformaciones que el país reclama.

Espero que estas reflexiones tengan eco entre los cada vez menos lectores, pero especialmente entre quienes hacen historia.

craveloygalindo@gmail.com

 


Algunas moralejas y un chascarrillo
06 de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Las historias que tienen moralejas y mensajes detrás de ellos son siempre muy poderosas, ya que dan mucho en que pensar.

Por ello decidimos platicar otras en el que cada historia corta tiene una gran moraleja detrás.

Pero antes para reír.

Estaban dos viejos, muy viejos y mañosos, en el juego de dominó, y de pronto comienzan a charlar sobre los achaques del envejecimiento, uno de ellos dice:

A nuestras esposas les afecta mucho más llegar a esta edad y lo peor es que ellas se niegan a admitir que se hacen viejas y tratan de esconder sus achaques.

Tienes razón, pero yo encontré un buen truco para hacerle ver a mi mujer que envejece a través de esta prueba.

Si quieres saber si tu esposa se está quedando sorda, colócate a 10 metros de ella y hazle una pregunta.

Después, cuando veas que no te responde, te acercas otros 5 metros, luego otros 2 metros y después 1 metro.

Y entonces no le quedará más que aceptar que realmente se está quedando sorda.

Al otro le agrada la propuesta y cuando vuelve a casa se coloca a 10 metros de su esposa y le pregunta con voz fuerte:

Mujer, ¿qué has preparado para la cena?

No recibe respuesta alguna.

Entonces se acerca a 5 metros y le hace de nuevo la misma pregunta.

De la misma forma, no recibe respuesta, así que se acerca a 2 metros y le vuelve a preguntar:

Nada. Sigue sin recibir respuesta.

El hombre, para comprobar el buen funcionamiento del truco de su amigo, se aproxima a apenas un metro y entonces grita:

Mujer, te he preguntado varias veces lo mismo y no me has contestado, ¿qué has preparado para la cena?

La esposa se voltea y bastante enojada le dice:

Y yo te respondo por cuarta vez viejo sordo:

¡Que no he preparado nada para cenar, pedí una pizza!

Seguimos con algunas moralejas.

La gente visitaba a un hombre sabio y solo se quejaban de los mismos problemas una y otra vez.

Un día, el sabio decidió contarles una broma y todos rieron a carcajadas.

Después de unos minutos, les contó el mismo chiste y solo unos pocos sonrieron.

Luego contó el mismo chiste por tercera vez, pero ya nadie reía ni sonreía.

El sabio sonrió y dijo: "no se puede reír de la misma broma una y otra vez. Entonces, ¿por qué siempre lloras por el mismo problema?

Moraleja: la preocupación no resolverá tus problemas, solo te hará perder el tiempo y la energía.

Dos amigos caminaban por el desierto. En una etapa de su viaje, tuvieron una discusión y uno le dio una bofetada al otro en la cara. El que recibió una bofetada se lo tomó muy mal, pero sin decir nada, escribió en la arena:

"hoy mi mejor amigo me dio una bofetada en la cara".

Siguieron hasta que encontraron un oasis, donde decidieron bañarse. El que había sido abofeteado quedó atrapado en el fango y comenzó a ahogarse, pero su amigo lo salvó.

Después de que se hubiera recuperado de su conmoción, escribió en una piedra: "Hoy mi mejor amigo me salvó la vida".

El amigo que abofeteó y salvó a su amigo le preguntó:

"Después de hacerte daño, escribiste en la arena y ahora, escribes en piedra, ¿por qué?"

El otro amigo respondió:

"Cuando alguien nos lastima debemos escribirlo en arena donde los vientos del perdón pueden borrarlo".

Pero, cuando alguien hace algo bueno por nosotros, debemos grabarlo en piedra donde ningún viento pueda borrarlo ".

Moraleja: no valores solo las cosas materiales de la vida, sino a las personas que tienes.

La verdad, siempre destaca. craveloygalindo@mail.com

 


Lleva siempre consigo un libro, dijimos del amigo Campa Landeros
05 de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Como homenaje a su trayectoria compartimos, con entusiasmo.

Los que dos colegas, hablan, dicen, de un tercero.

Son textos.

De don José Antonio Aspiros Villagómez. Y don Teodoro Rentería Villa. Ambos maestros y licenciados, también, en periodismo.

Empecemos con el segundo, vicepresidente del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo, CONALIPE. Y de la Federación de Asociaciones de Periodistas de la República Mexicana, FAPERMEX.

“La mañana de este viernes 1 de mayo de 2020 el periodista Mario Andrés Campa Landeros falleció de un infarto.

Miembro del Club Primera Plana y del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo dedicó su vida a la información, a la poesía, a la escritura, a la composición, al canto y a la “bailada”.

Fue jefe de redacción de los tres principales diarios de impacto nacional en México: Novedades, El Universal y Excélsior.

En 2008 recibió el Premio México de Periodismo “Ricardo Flores Magón” en el género Articulo de Fondo por su trabajo publicado en el Semanario 24, de la Ciudad de México.

Estudió Periodismo en la Universidad Nacional Autónoma de México; el 30 de noviembre de 2012 logró su titulación como Licenciado en Periodismo que otorgó la Secretaría de Educación Pública mediante el Sistema de Reconocimiento de Saberes Adquiridos con el aval de la FAPERMEX como Institución Evaluadora.

Aficionado a la lectura, el colega Carlos Ravelo Galindo lo citó en su columna publicada en Quadratin en el reciente 26 de marzo de este año: “Lleva siempre contigo un libro. Como el colega Mario Campa Landeros. Y léelos, como él.”

En 2006 publicó la obra ’Verdaderos Maestros del Periodismo’; la intención era generar una serie de siete libros para dar a conocer la especialidad de cada uno de los reporteros que aborda.

Su obra es “un recuerdo de los tiempos en que la actividad reporteril se hacía a fuerza de duros golpes hacia la conquista de un lugar en la historia”.

Mario Campa rindió “un merecido homenaje a todos los periodistas que dedican o han dedicado su vida con valentía a

informar a través de sus diversos medios de comunicación; prensa escrita, revistas, radio, televisión y la internet, sobre el acontecer nacional e internacional, desafiando todos los peligros, arriesgando sus vidas y viviendo los dramas de la historia.”

Hoy el homenaje es para el amigo MARIO ANDRÉS CAMPA LANDEROS. Descanse en paz”.

Del otro maestro periodista, don José Antonio Aspiros Villagómez, incluimos hoy sus Textos en libertad, en recuerdo también del desaparecido colega Mario Andrés Campa Landeros. Nos platica:

En la mañana de viernes 1 de mayo falleció a los 75 años el poeta y periodista mexicano Mario Andrés Campa Landeros, quien fue jefe de redacción de tres diarios de la capital del país y uno de los miembros más destacados del Club Primera Plana, mismo que nos informó de esta sensible pérdida.

Entre sus muchas inquietudes tuvo -lo mismo que el ya también desaparecido reportero Carlos Borbolla- el empeño de dar a conocer las vivencias, enseñanzas y ejemplos del trabajo de quienes a su juicio fueron los más importantes periodistas de México y para ello escribió Verdaderos maestros del periodismo, una obra que se proponía difundir en una serie de siete volúmenes.

El primero de ellos -323 páginas- lo presentó en junio de 2016 (ya no supimos de los demás) y trata de experiencias como el miedo a morir durante la guerra en El Salvador, la temeridad de violar la prohibición militar de enviar fuera de Chile noticias durante el golpe de Estado contra Salvador Allende, el orgullo de haber sido discípulo del “reportero non” Carlos Denegri, el aprendiz que hizo morderse la lengua al exigente corrector de estilo, la temeridad de meterse al automóvil del presidente de la república para pedirle una entrevista, una explicación de la “caída del sistema” que exonera al secretario de Gobernación, las aventuras de un niño dentro de un cabaret, y hasta un rosario de bendiciones.

A juicio de Campa, esos maestros del periodismo son en ese primer volumen y en orden de presentación, José Luis Becerra López, Berta Hidalgo de Gilabert, Fernando A. Irala Burgos, Carlos Ravelo Galindo, Ignacio Zúñiga González, Pedro Alberto Flores Linares, Salvador Estrada Castro, Javier Álvarez Rodríguez, Héctor Manuel Chávez Guzmán y Manuel Mejido Tejón.

Además de lo ya mencionado, en la obra los lectores pueden conocer cómo es la vida profesional y social de los periodistas, cuáles son sus retos en el trabajo y cuáles sus satisfacciones, por qué tienen

o no riquezas materiales y, además, pueden leer fragmentos interesantes y selectos de sus reportajes, sus noticias, sus artículos y sus enseñanzas.

Por ejemplo, contiene una entrevista al inabordable cronista deportivo Pedro ‘El Mago’ Septién, la crónica cultural de un viaje por Europa, la historia de “los 41” que eran 42 pero Porfirio Díaz quitó a su yerno de la lista, un ensayo sobre el verbo más usado por los mexicanos, y entrevistas a quienes inspiraron la obra Los hijos de Sánchez, por cuya publicación en la época de Gustavo Díaz Ordaz, tuvo que dejar su cargo el entonces director del Fondo de Cultura Económica, Arnaldo Orfila Reynal.

En su resumen autobiográfico, Mario Campa mencionó que sus amigos lo “retratan” como “una mezcla de escritor, poeta, cantante, compositor, bailador de danzón y, por añadidura, periodista”, que fue jefe de redacción en los diarios Novedades, El Universal y Excélsior. Y en la presentación de su libro en el Club de Periodistas de México hace casi cuatro años, su hija Marión Verónica Campa Ortigosa habló de la “pasión” con que su padre dedicó “noches, tardes y mañanas” a dicho proyecto.

Este tecleador coincidió con su colega Mario Campa Landeros como miembro de la generación “Club Primera Plana 1959-2013” de licenciados en periodismo, y además ambos fuimos invitados como jurados en la categoría de medios impresos, del Premio al Mérito Periodístico ‘José Pagés Llergo’ organizado por la Universidad Quetzalcóatl de Irapuato, Guanajuato, en 2007 y 2008.

Descanse en paz quien también fundó y dirigió por un tiempo el periódico Semanario 24, destinado a lectores de la Zona Metropolitana del Valle de México”.

En honor, repetimos, a un verdadero socio distinguido de los respetables y respetados Club Primera Plana y del Colegio Nacional de licenciados en periodismo.

craveloygalindo@gmail.com

 


De una a otra admirada mujer
01 de mayo de 2020

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Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Escribir de doña Margo Glantz es virtud de otra escritora. Y también digna representante del gremio.

Nosotros simplemente compartimos sus puntos de vista. En los que coincidimos. Y respetamos a cabalidad.

Norma Vázquez Alanís nos platica, así:

La nonagenaria escritora y académica Margo Glantz recibió un reconocimiento por parte de sus colegas y amigos en un seminario denominado “Celebramos a Margo Glantz”, que tuvo lugar en el Centro de Estudios de Historia de México (CEHM) de la Fundación Carlos Slim y fue organizado por su director, el historiador Manuel Ramos Medina.

El interesante coloquio se dividió en dos partes, una dedicada al ensayo y otra a la ficción, géneros que predominan en la vasta obra de Margo Glantz, quien forma parte del Consejo Consultivo del CEHM desde 1996; sin embargo, muchos de los ponentes que participaron en el segmento de literatura, inevitablemente tocaron el tema del ensayo.

Julieta García, escritora, editora y articulista, refirió que en la obra narrativa de Margo Glantz el cuerpo es donde se pueden leer los signos del pasado y del futuro, la piel, la boca, el cabello son una suerte de tarots que permiten ver qué pasará a partir de lo que ya sucedió, porque llevan siempre la marca del tiempo transcurrido.

Y un ejemplo fehaciente es la novela ‘El rastro’, en la cual la protagonista diserta sobre lo inevitable de la transformación a la que todos nos someteremos eventualmente, y a eso que se le pega al cuerpo conforme avanzan los días y que culmina con la muerte, apuntó quien es escritora residente de la Universidad de Maryland, en Baltimore.

Asimismo, Glantz habla en su obra de ciudades, especialmente de la de México, que recorre con los ojos de su pasado y de su presente.

Esta urbe que fue tan hermosa le genera a la autora sorpresa por su transformación en algo más que horrible, en anodino.

Las laceraciones que el paso del tiempo deja son muy obvias, se tiran edificios históricos para construir moles sin rostro, se esfuman parques, montañas, el mismo cielo hace mutis, ahora puro color pardo, aliento de enfermedad, y la voz narrativa consigna sus enfermedades

como un médico lo hace con los padecimientos en su bitácora, que usará después para levantar el acta de defunción.

La literatura de Glantz, a diferencia de lo que sucede con otras, es irreductible, se trata de una literatura de literaturas que abreva de la vida cotidiana, de ese corpus que somos todos nosotros.

Sus narradores son capaces del mismo grado de crueldad que de compasión y de afecto, y lo narrado suele ser a la vez brutal y divertido.

Esta capacidad de escribir cosas que dan risa, aunque sean dolorosas, es envidiable y admirable, sostuvo Julieta García.

El editor y escritor Oscar Benassini, copropietario de la librería de segunda mano ‘La Murciélaga’, en la Ciudad de México, fue muy conciso al decir que la escritura de Margo es biológica e incontenible, corporal. Es una escritura elástica y fluida como éter.

A su vez, el escritor mexicano Mario Bellatín glosó algunas consideraciones de la propia Margo Glantz sobre su literatura, que la describen tal cual es.

Agrega Bellatín este comentario de Margo: “’Las genealogías’, que yo consideraba una obra maestra -cosa que se constató tiempo después- apareció como una novela totalmente incomprensible, se vendieron sólo 440 ejemplares; ¿se dan cuenta?, para ser una académica célebre de la que todo el mundo hablaba, se vendían sólo 440 de una novela”.

También teólogo y comunicador aludió a una aclaración de Glantz sobre la afirmación del novelista francés Claude Simón, de que el escritor tiene derecho a equivocarse, pero no a mentir.

“Eso es muy curioso porque un tejido de mentiras es mucho más interesante que la verdad, pues es más vasto; la verdad, en cambio, es un poco limitante.

Además, el concepto de verdad es una idea bastante cuestionable, yo no sé qué es la verdad de mi infancia, una verdad que yo no comprendo, hay verdades momentáneas, vacilantes y provisionales, pero la verdad no existe, a fin de cuentas, la verdad es un concepto fascista que sirve solamente a la opresión.

“Sus investigaciones académicas revelan, por lo tanto, otros hilos: la Malinche, Sor Juana, las mujeres de Pedro Páramo son algunas de las contribuciones de Margo Glantz al esclarecimiento de la historia y la literatura en México, creo que en ella se han anudado onda y escritura en México”, finalizó.

craveloygalindo@gmail.com